¡Actuamos por el océano!
Nos complace anunciar nuestra colaboración con la asociación Ocean Co. y unirse a una organización cuyo objetivo es luchar contra la contaminación plástica en los océanos.
Nuestra misión común: recoger el equivalente a 7 mil millones de botellas de plástico para 2025 que, de lo contrario, terminarían en el océano.
Como primera marca francesa en unirse al programa Ocean Co, ¡nos importa actuar!
El impacto del plástico en nuestros océanos
¿Sabías que cada día, 2 millones de kilogramos de plástico se derraman en nuestros océanos? Es decir, el equivalente a un camión de basura por minuto. Si no actuamos, para 2050, la cantidad de plástico en nuestros océanos pesará más que la de los peces que habitan en ellos.
El plástico presenta peligros reales para nuestro planeta y su ecosistema. La contaminación plástica amenaza la fauna marina, impacta la cadena alimentaria, genera contaminación química, degrada lentamente el entorno marino... El océano es nuestro campo de juego y es nuestra responsabilidad protegerlo.
La acción de Ocean Co
Ocean Co busca construir una comunidad de individuos y organizaciones luchando contra la contaminación de los océanos y que desean apoyar a las comunidades locales en las zonas costeras donde la contaminación plástica es más crítica.
Desde sus inicios, han recogido más de 8 millones de kilogramos de plástico en los océanos, brindando apoyo indispensable a más de 8.700 comunidades costeras.
En asociación con Ocean Co., nos comprometemos a luchar contra la contaminación plástica en el océano a través de nuestra gama de productos BIO II.
Por cada combinación BIO II que vendemos, nos hemos comprometido a recoger 3 kg de plástico arrojado al océano, lo que equivale a evitar que 264 botellas de plástico lleguen al océano.
El plástico es recogido por los habitantes de estas comunidades costeras, como en Filipinas, Brasil, Egipto, Ghana, Kenia, India o Indonesia. Este plástico será reciclado, upcyclado o utilizado para co-tratamiento (para sustituir los energéticos fósiles o las materias primas en la fabricación de cemento, ya sea como combustible o material).
Una vez recogido, el plástico se intercambia por dinero o créditos que permiten financiar la matrícula escolar, equipos electrónicos, atención médica y microcréditos. Esta infraestructura es posible gracias a los socios Plastic Bank, Plastics for Change y rePurpose Global, quienes establecen centros de recolección y garantizan la validez de las transacciones a través de soluciones tecnológicas de trazabilidad.
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